Y un día se abrió el arco…

El sábado 27 de junio, día previo a la jornada electoral que sentenció a una forma antigua y prepotente de entender la política, Kilo 800 debía hacer frente a un nuevo desafío en su carrera hacia la próxima ronda del abierto. Lo que quedaba claro es que la veda no debía ser de goles, y mentalizados en ello se pensaron diferentes esquemas para enfrentar a La Hora Referí, un rival que aun no había sumado puntos.
La banda se presentó con Agu querido en el arco; Alex, el Gordo, Pepe y Tomas en el fondo; Rodro, Pancho y el Rata en el mediocampo, el Tano mas adelantado y Facu con el Negro arriba. El encuentro comenzó muy bien, con toque y llegadas para el aurinegro. El medio funcionaba bien, se conectaban las sociedades y había buen futbol. De la derecha del Rata salió el primero, con una bomba de afuera. Adelante, las flechas cuadrileñas dejaban mal parada a una defensa sensible. Precisamente con un pelota en profundidad de Tomi entró solo el Negro para forzar al arquero a buscarla atroden. Era 2-0 para Cuadril.
El segundo tiempo comenzaba de la misma manera, con buen futbol y chances para ampliar el marcador. Panchito le dejo su lugar a Seba. Tras un centro desde la derecha que quedo picando en el área, el Rata a la carrera la clavó de cabeza junto al palo izquierdo del arquero. Uno de los hechos mas memorables del partido ocurrió en ese preciso momento, cuando tras el centro hubo un claro empujón del defensor que motivó a Pancho saltar del banco al grito de “- Penaaal!”. Lo llamativo es que nuestro delegado que reclamaba penal no advirtió que igualmente la jugada terminaba en gol, por lo que tuvo un llamado de atención muy humillante por parte del embarazado arbitro: “Callate pibe, que yo tengo 10 libertadores encima”. Le mostró toda la chapa de juez experimentado en licores varios y finalmente Pancho se salvó de la tarjeta (que merecía por charlatán).
El resultado quizás hizo que el rival comience a llegar más y Kilo se relaje un poco, situación que es inaceptable que vuelva a ocurrir. Así, con más empuje que futbol, La Hora Referí consiguió dos goles y preocupó al carnisa. Sin embargo llegó el cuarto, nuevamente por medio del Rata con un remate cruzado. Sobre el final llegó un nuevo descuento de un tiro libre donde jugó en contra la inocencia de Kilo. Cuando moría el partido hubo un hecho que merece especial atención. Tras una gran jugada de Tomi en la que recorrió toda la cancha con la pelota hasta quedar frente al arquero, el guardametas rival salió con una patada muy mala leche contra nuestro jugador cuando este definía por sobre su cabeza. Allí se gestó el descontrol. Tomi tiraba una trompada que apenas alcanzó a impactar al yosapa del 1 rival, que cayó al piso como si hubiese recibido tres puntazos en Fuerte Apache. Que la pelota ingrese al arco quedaba como anécdota, ya que no fue sancionado el gol por parte del árbitro que expulsó a ambos jugadores. Afortunadamente no hubo informes ni pasó a mayores.
Kilo 800 volvía a sumar 3 puntos y un buen partido.
De un tiro libre nació un intento de camarilla en el plantel. Hay quienes dicen que hay dos grupos: Los amigos del Gordo por un lado, y los amigos de Tano por el otro. ¿Será cierto? Los siguientes partidos nos darán un mejor panorama.

El medallero

Premio Vino con frula -
El 1 de La Hora Referí. Definitivamente terminó pidiendo la hora desde afuera. Patada mala leche, papelón tirándose al piso y 4 pepas adentro. Desastre…

Premio San Román -
El Rata. Gran despliegue por la banda izquierda y 3 goles fundamentales. Se transforma en el goleador con 4 tantos.

Premio Chamigo -
Tomas. Una asistencia y gran jugada que debió haber sido sancionada como gol. Quedó manchado por la reacción en el final y la tarjeta roja.